Desde rumores sobre aborto a especulaciones de muerte, las teorías conspirativas que han marcado el «descanso» de la Princesa de Gales.
Desde su salida del ojo público en enero a raíz de una cirugía abdominal, el nombre de Kate Middleton ha sido tendencia en todas las redes sociales. Miles de personas han comentado, creado y propagado diversas especulaciones sobre su salud o estado en general. La génesis de este fenómeno nació a raíz de una polémica publicación en su cuenta de Instagram.
La falta de información oficial por parte de la Casa Real Británica sobre su salud ha ocasionado tal descontrol que diversos medios británicos han exigido que el Palacio de Kensington lance un comunicado oficial, como el que hicieron para anunciar la enfermedad y tratamiento médico del Rey Carlos III, y que se logre así esclarecer el panorama.
Este ciclón mediático en el que se ha visto involucrada la familia real inició con el anuncio del príncipe William sobre su ausencia en el servicio fúnebre de su padrino, el Rey Constantino de Grecia, por motivos personales.
Tanto en X (ex Twitter) como en TikTok comenzaron a publicarse múltiples rumores y teorías que exponían que, básicamente, William no asistió a la ceremonia porque su esposa estaba en muy mal estado o que ellos estaban peleados, a un paso del divorcio.
La paranoia explotó cuando Kate publicó una imagen junto a sus hijos en el marco del Día de las Madres. Según expertos de diversos medios de comunicación, dicha fotografía había sido retocada.
Y como si fuera una bola de nieve, este asunto comenzó a hacerse más y más grande. Las teorías más virales son:
Que Kate está en coma; sufrió un aborto; se cortó mal pelo y está esperando a que le vuelva a crecer; se divorció por las supuestas infidelidades de su esposo; murió y están buscando un reemplazo (sí, como la teoría de Avril Lavigne); se realizó una cirugía estética que salió mal; le donó un riñón al Rey Carlos; tiene cáncer de útero o de ovarios; le hicieron una histerectomía, etc.
Y si faltó alguna por nombrar, puede revisar en los hashtags que han sido tendencia por semanas en las diversas redes sociales: #WhereIsKateMiddleton, #RoyalAnnouncement, #KateGate.
Hay tanta especulación, desinformación y expectativas que se rumoreó por unos días que el Palacio de Kensington iba a mandar un comunicado oficial a la BBC, para que esta a su vez la publicara.
“Todo el mundo esperaba ese anuncio, el cual no hubo. Incluso hubo medios que lo cubrieron. Estas cosas no se anuncian, solo pasan”, comentó James Gatica, corresponsal internacional.
Esta viralidad de rumores se debe en parte a que la Casa Real no ha dado tanta información como nos tenía acostumbrados durante el periodo de la Reina Isabel II, añadió James.
Es tal la magnitud de escepticismo sobre este caso que aún cuando el medio británico The Sun publicó un video en donde se puede ver caminando por la calle tranquilamente a Kate junto a William en Windsor, la gente duda que sea ella, afirmando que es una doble corporal.
Puedes ver el vídeo aquí: https://www.thesun.co.uk/royals/26766840/princess-kate-middleton-shopping-trip-video-william/
El inexplicable silencio por parte de la Corona Británica ha sido perjudicial para su imagen y credibilidad, medios británicos informan que los círculos sociales de élite están llamando a la familia Real como la “Realeza Rota”. Aunque también, hay aquellos que están a favor de la privacidad de información personal.
Catalina Ramos, periodista experta en la Familia Real Británica, dice que:
“La imagen de la Casa Real se ha visto afectada desde el punto de vista de las confianzas. Varias agencias internacionales optaron por retirar la fotografía, manipulada por Kate, por considerarla ‘no confiable’. Pese a esto, hay que entender algo clave. Cómo dice el dicho, ‘no existe la mala publicidad’. Mientras se hable de la monarquía, esta seguirá viva”.
De hecho, el Daily Mirror calificó a la foto editada como la “imagen del caos” y que este escándalo es un desastre comunicacional. Este remesón llegó a tal punto que la misma Princesa de Gales tuvo que pedir disculpas por manipular la imagen de sus hijos.
James Robinson, fundador de Woburn Partners, le dijo a The Guardian lo siguiente:
“La confianza es muy difícil de reconstruir. Normalmente, se recomendaría transparencia después de un paso en falso de este tipo, pero cuando se trata de una cuestión de salud, la princesa no debería tener que revelarlo. Después de todo, ella no es la jefa de Estado».
Se espera que ella haga su reaparición durante el Domingo de Pascua, ya que tradicionalmente la familia Real se reúne en la Capilla de Saint George para un servicio religioso. Si no, se apunta a que podría retornar a mediados de abril cuando comiencen las vacaciones de Semana Santa en Inglaterra.
Teorías conspirativas
Con todo este asunto cabe preguntarse por qué fascinan estos casos; tras el asalto al capitolio en Estados Unido, National Geographic publicó un artículo en donde explicaba por qué las teorías de este tipo gustan tanto y se expanden hoy como un virus gracias al internet.
Básicamente, es una tendencia humana el creer cualquier cosa que afirme nuestras creencias preconcebidas, sean ciertas o no. La Organización Mundial de la Salud ha llamado a este fenómeno infodemia, porque es un momento en donde hay muchos datos falsos circulando en todo el mundo gracias a las redes sociales, y que puede llegar a tener repercusiones graves.
Sander Van Der Linden, psicólogo social de la Universidad de Cambridge, detalla que estas teorías y la creencia de ellas ayudarían a las personas a sentir una sensación de control en un mundo en donde no se tiene mucho dominio de la información que se recibe indiscriminadamente.
Con todo lo anterior dicho, se puede entender por qué la sociedad británica se ha vuelto un tanto loca por la desaparición de Kate. Ellos estaban acostumbrados a siempre tener acceso e información a datos específicos y privados sobre los miembros de la familia Real. Al no tenerlos a su disposición, hay una incertidumbre que lleva a la creación y aceptación de las teorías conspirativas que circulan en todo el mundo actualmente en torno a la figura de Kate Middleton.
