Una comitiva fúnebre acompañó el cuerpo de Joan Turner de Jara hasta el cementerio general, donde reposan sus restos junto a los de su esposo, Víctor Jara. Desde Plaza Brasil, cientos de personas fueron parte de su último adiós.
Por: Nicolás Kuncar Salvador.
La despedida de Joan Turner de Jara demostró el legado que dejó en vida. Con un cortejo fúnebre que comenzó desde el Centro de Danza Espiral hasta el cementerio general, el cuerpo de la activista por los derechos humanos estuvo acompañado de sus dos hijas, Manuela y Amanda, y cientos de personas que sintieron el pesar de su pérdida.
Miguel Littín, cineasta y exconvencional chileno acompañando a quien fue su amiga en el cementerio general
Las manifestaciones de apoyo por parte del Centro de Danza Espiral, junto con fieles seguidores de Víctor Jara, quien fue su esposo hasta su asesinato, y adherentes a la lucha por los derechos humanos fueron parte de la comitiva de inicio a fin. Con la frase “justicia, verdad. No a la impunidad”, los seguidores hacían notar su presencia, tornando el último adiós en una marcha pacífica. Los gritos de aliento político también marcaron la tónica de la jornada.
Cortejo fúnebre que se dirigió hasta el cementerio general manifestándose tras muerte de Joan Jara.
Inti-Illimani e Isabel Aldunate participaron en el cementerio general con una demostración musical en honor a la difunta, quienes, además, le dedicaron palabras por “el gran aporte cultural e histórico” en Chile y su “lucha hasta la muerte por la verdad”. Canciones de Víctor Jara, los Bunkers, entre otros grupos nacionales sonaban en los parlantes de quienes acompañaron a Joan de Jara hasta su entierro.
Agrupación Inti-Illimani en un último homenaje a Joan de Jara camino a su entierro.
“Esto es un homenaje, no un acto político” fue la frase que dio la apertura del cortejo en el cementerio hasta el lugar de descanso eterno, como dijeron ambas hijas, “junto a su amado Víctor”. De la descendencia de Turner, entre lágrimas y sollozos, salieron las últimas palabras que hicieron vibrar el féretro antes de perder la luz del sol para siempre.
Fragmento de las últimas palabras de Manuela Bunster a su madre.
La herencia cultural
“Siempre fue una mujer muy generosa entregando, y nosotras detrás intentado aprender todas esas enseñanzas” dijo su hija Amanda en el entierro, dejando entrever una de las facetas de Joan Turner de Jara. Ganadora del premio Nacional de Artes de la Representación y Audiovisuales de Chile en 2021, reconocida por la Academia Chilena de Bellas Artes en honor a su aporte cultural en la danza, creadora de la Fundación Víctor Jara y escritora del libro “Víctor Jara. Un canto truncado”, fueron algunos de los logros de Turner en vida.
Homenaje del Centro de Danza Espiral, fundado por Joan Turner de Jara.
Nacida en Londres y nacionalizada chilena en 2009, la viuda del cantautor fue una fiel luchadora por los derechos humanos desde la dictadura de Augusto Pinochet. A la vuelta del exilio en 1984, junto a su exesposo, el bailarín Patricio Bunster, fundaron juntos el Centro de Danza Espiral, marcando un legado en la historia chilena.
Durante sus últimos años, se mantuvo activa por la búsqueda de los asesinos de Víctor Jara y logró verlos sentenciados ante la ley. A sus 96 años, dejó el mundo terrenal, pero con una herencia aporte cultural para Chile.
