Por Fraid Zerené, presidente del Centro de Estudiantes de Periodismo UAI
Pasadas las seis de la tarde del viernes, comenzaron a llegar decenas de personas al canal Señal 3 de La Victoria, donde se veló a Francisca Sandoval, reportera que murió baleada mientras cubría las protestas por el Día del Trabajador y la Trabajadora.
Una imagen con su rostro, lienzos que exigen justicia y mensajes de apoyo formaban parte del ambiente de la ceremonia, donde se reunieron los familiares, colegas y cercanos que llegaron con banderas, velas y flores. Sus parientes más próximos lanzaron al cielo globos blancos en su honor.
Estaba planeado que la jornada se extendiera por varias horas, dijo el director de Señal 3 La Victoria, Benjamín Lillo.
“Por Francisca derrotaremos este sistema de muerte”, se leía en uno de los carteles instalado en el frontis del medio. En el mismo lugar hay un mosaico incompleto de Señal 3, tal como ahora estará La Victoria sin Francisca Sandoval.
El sábado se realizó de forma privada el funeral, sus seres queridos enterraron el cuerpo de la primera periodista asesinada mientras ejercía su labor desde el retorno a la democracia en Chile.
Las fotografías son del autor de esta nota.
