El frente a frente más esperado por el mundo deportivo se resolvió este domingo. Terminó el sueño mundialista y las comparaciones entre las dos principales figuras del mundial se respiran en cada discusión. Messi o Mbappé. Dos joyas que escribieron la historia de manera distinta para cada uno.
Escrito por Andrés López Awad
Hasta que llegó el picor que faltaba. A solo horas del partido final de Qatar 2022, el volante francés, Aurélien Tchouaméni, encendió la antesala del encuentro con solo unas palabras: «Para mí, el mejor futbolista del mundo es Kylian Mbappé… y lo va a demostrar este domingo». Todo, a partir de las declaraciones de la estrella del equipo francés, Antoine Griezmann, quien aseguró que para él, Lionel Messi era el mejor jugador del planeta. Para muchos las comparaciones son odiosas, pero es muy difícil ignorarlas, cuando al frente están las dos principales figuras de este mundial, que han liderado a sus respectivos equipos, nuevamente, a una final planetaria.
Enfrentar a Messi y Mbappé es un ejercicio exquisito, tanto por los pergaminos con que llegaron a Qatar, su desempeño durante el Mundial y lo que esta final significó para cada uno.
Messi fue la figura del Mundial, pero Mbappé fue el goleador de la final (y del torneo) con la que Argentina conquistó su tercera corona al imponerse sobre Francia en penales (4-2) tras empatar 3-3 en un partido que llegó hasta el alargue. El argentino anotó dos tantos y el francés tres.
Para Argentina es su tercer campeonato mundial. Ya lo fue en 1978, en 1986, conducido por Diego Maradona, y ahora en 2022, con la conducción de Messi.
Dos caras de una misma moneda
Revisemos algunos números de los compañeros del Paris Saint-Germain. Lionel Messi, de 35 años, ha disputado 171 encuentros y ha marcado 98 goles con la camiseta de su selección, trece de ellos anotados en los cinco mundiales que ha disputado. Kylian Mbappé, de 23 años, en tanto, ha jugado 65 partidos y ha marcado 36 goles con Francia, doce de ellos en sus dos mundiales jugados.
El palmarés individual de ambos jugadores es una vitrina llena de oro, en la que el argentino toma la delantera con creces. Once ligas nacionales, contra cinco del galo. Cuatro Champions League, contra ninguna de Mbappé. Messi tiene un oro en los Juegos Olímpicos y una Copa América. Mbappé no tiene ni el primero, ni una Eurocopa.
Sin duda, la diferencia queda más marcada en dos premios que son el «pero» de cada uno. Primero, los siete Balones de Oro que tiene Messi en su poder contra un Mbappé que todavía no tiene ninguno. Se podría argumentar a favor del francés la diferencia de doce años entre ambos, pero el exdelantero de la selección inglesa, Wayne Rooney, demolió hace unos meses ese argumento cuando pidió que le recordaran a Mbappé que a su edad «Messi ya tenía cuatro balones de oro».
Por el contrario, en las vitrinas del galo luce la Copa del Mundo, un trofeo esquivo hasta el domingo para el astro argentino. A la final de Qatar llegaron en condiciones similares. Ambos habían marcado cinco goles. Messi ha prestado tres asistencias, mientras que Mbappé lo ha hecho en dos. En la final, el argentino anotó un doblete y llegó a siete tantos, solo superado por el francés, que marcó un triplete y llegó a ocho tantos.
Michael Jordan, el basquetbolista más brillante que ha existido en la historia de ese deporte, dijo una vez que la pregunta que todo el mundo se hace sobre quién es el mejor jugador de toda la historia es sencillamente «tonta». Que la pregunta correcta debiese ser «¿cuál es el mejor equipo de todos los tiempos?», y mientras va enumerando su ranking, Jordan enseñó a la cámara los anillos que recibió como mejor jugador en cada uno de esos equipos. Una manera muy elegante de dejar en claro quién es el mejor…
El frente a frente de este domingo fue eso. La copa la copa para Argentina, un equipo lleno de seleccionados que son suplentes en sus clubes, comandados por el siete veces ganador del Balón de Oro, pero el goleador del torneo se quedó para el francés.