Habrá que retroceder la perilla del reloj una vuelta completa y volver al polémico “horario de invierno”, en que amanecerá más temprano y por lo tanto, oscurecerá antes también.
Por Emilia Valenzuela
A partir de las 24:00 horas de este sábado 2 de abril comenzará a regir una nueva hora en Chile continental, que pasará del actual huso horario GMT-3 a GMT-4. Este cambio se mantendrá hasta principios de septiembre. Según estableció la Ley 8.777, todos los chilenos deberán atrasar sus relojes en 60 minutos.
Este método se llevará a cabo en todo el país, a excepción de Magallanes y la Antártica, única región de Chile que mantiene su horario el año completo, según el Decreto Supremo 1.286, en el que se mencionó que dicha zona tendrá de forma permanente el «horario de verano».
Tras el mandato del Presidente Boric, que lleva menos de un mes, hay muchas medidas que están en evaluación, como por ejemplo esta. Según comentó a Cooler el subsecretario del Ministerio de Energía, Julio Maturana, “se creó un Comité Técnico Interministerial, compuesto por: Educación, Salud, Interior, Transporte, Economía, Energía, Agricultura y Segpres, el que estará encargado de analizar en base a la evidencia si mantener o eliminar esta norma”.
¿Será una medida para ahorrar consumo energético?
Cooler se comunicó con el ex ministro de Energía de la Presidenta Bachelet, Andrés Rebolledo, quien mencionó que el consumo principal se encuentra en los amaneceres y atardeceres, por lo tanto la razón fundamental de aquello es “aprovechar mejor las horas del día y eso con el objeto de tener un ahorro energético”. Aseguró que se trata de un beneficio fundamental y la razón por la cual se sigue aplicando esta medida.
¿Qué pasa con la seguridad? Tomamos contacto con el sociólogo Mauricio Olea, quien mencionó que el hecho de que oscurezca “más temprano” afecta en las actividades cotidianas que se realizan. Recalca además que «se tiende a asociar la noche con inseguridad y delincuencia por lo que se preferirá estar en la casa que hacer actividades al aire libre”, mencionando que evidentemente disminuyen los asaltos.
¿Y qué ocurre con las personas? ¿Cuánto nos afecta? La médica Karin Kleinsteuber, neuróloga pediátrica, aseguró que no hay evidencia científica de que el desplazamiento de una hora produzca un efecto significativo en el organismo. Sin embargo, es muy importante cómo esto puede afectar a las rutinas familiares, que a su vez impacta en la vida de los niños.
Tal como mencionó la neuropediatra, el día activo con luz durará menos, lo que limitará la actividad física, los juegos e incluso la exposición al sol, que asegura tiene una gran importancia en distintos aspectos de la vida. “Antes se pensaba que tenía que ver con los huesos y hoy se sabe que tiene una importancia y un rol mucho más amplio que eso, que tiene que ver con las respuestas inmunológicas, con aspectos del ánimo, entre otras cosas”, planteó.
Por otro lado, la experta hizo énfasis en la importancia de una óptima consolidación del sueño, y que para ello debemos preparar a nuestros organismos. Esto implica, por ejemplo, limitar la exposición a pantallas, optimizar la exposición al sol, para luego descansar, alejarse del ruido y limitar la exposición de luz, y todo esto: “para hacer más fácil el acostumbrarse a este nuevo horario”.