La solicitud de formalización a Daniel Jadue presentada por la Fiscalía Metropolitana Centro Norte, abrió las expectativas de la derecha en Recoleta. Chile Vamos y Republicanos van de lleno por una alcaldía que desde hace más de una década es liderada por el PC. Este miércoles, el edil acusó al Frente Amplio de ser un mal socio y participar de una campaña para cortar su carrera política.
Por Martín Escobedo
A sólo horas de conocerse la futura formalización del actual alcalde de Recoleta, Daniel Jadue, y de siete personas más por presunta responsabilidad en delitos de cohecho, administración desleal, fraude al fisco y estafa, la oposición no perdió tiempo y presentó sus candidatos para un municipio que es clave para el Partido Comunista: cinco de los ocho concejales pertenecen a esa colectividad. Nunca han estado tan cerca de perder como ahora tras la solicitud de la Fiscalía Metropolitana Centro Norte, que investiga las irregularidades en torno a las farmacias populares de la comuna.
La carta del PC sigue siendo Jadue, mas no Daniel. Fares Jadue, ex DIDECO de la comuna y concejal desde el 2021, cuando fue elegido con la primera mayoría (15,8% de los votos) es la nueva apuesta del partido. Él asegura que no pariente del edil: «es un apellido muy común en la comunidad palestina», dijo a Fast Check CL en marzo de este año.
En el oficialismo, Convergencia Social declinó presentar candidatos a esa comuna y el PPD decidió inscribir a Karim Marzuqa, hijo del exconcejal Mikhael Marzuqa. Ambas colectividades buscarán formar un pacto electoral, mientras que el PS se bajó de la carrera. Eso han dicho hasta ahora.
Chile Vamos anunció la candidatura de Mauricio Smok (UDI), quien disputó el cargo a Daniel Jadue en 2021, obteniendo un 23,86% de los votos, muy por debajo del 64,1% del alcalde. Esa experiencia sumada a sus años como concejal bastaron dentro del partido para considerarlo como el candidato idóneo. Mientras que, Renovación Nacional (RN) optó por Felipe Cruz para romper la hegemonía comunista. Tras los eventos de las últimas horas, éste dijo: “La era de los Jadue ha terminado y va a terminar de la peor forma para ellos”
El Partido Republicano lleva como candidata a Ruth Hurtado, secretaria general del conglomerado y miembro de la Convención Constitucional. En la colectividad movieron las piezas del tablero, porque hasta antes de la solicitud de la Fiscalía la tenían en mente como aspirante a alcaldesa por Temuco. Ante el repentino cambio, aseguró que está dispuesta a bajar su candidatura porque “nosotros estamos disponibles a no ir si se va a llevar igual a otro candidato”, pero el tiempo no perdona, el plazo para inscribir a los candidatos en las primarias concluye el 10 de abril.
La investigación que complica al PC
La Fiscalía ha centrado su investigación en ocho personas, entre ellas el alcalde Jadue, por cuatro delitos en torno a las farmacias populares. El Ministerio Público tomó el caso en 2022 tras una querella presentada por Best Quality, empresa proveedora de distintos insumos claves en la pandemia como mascarillas N95, guantes y termómetros. La compañía denunció estafa de parte de la Asociación Chilena de Municipalidades con Farmacias Populares (Achifarp) y Daniel Jadue, su gestor, por deudas impagas que hoy ascienden a 1.291.937.035 pesos, más de mil millones a la empresa ya mencionada y a 217.198.000 pesos a V Exponencial.
A eso se suma que, en el mismo año un informe presentado por la Contraloría derivó en una investigación del Ministerio Público que terminó acusando a la Achifarp de mal manejo de dineros públicos, luego de que no se pudiera acceder a sus estados financieros ni rendiciones anuales.
Para el 2023, el caso tomó más fuerza con el informe de la UAF (Unidad de Análisis Financiero) en el que informa “operaciones sospechosas”. Amplió la investigación a delitos de malversación de caudales públicos, fraude al fisco, cohecho y lavado de activos. Tras años de investigación, la Fiscalía solicitó la formalización, que según Daniel Jadue, se podría haber hecho “hace años o en diez meses más después de las elecciones, se ejecuta coincidentemente en medio de un año electoral”. Sabe que la continuidad del PC corre peligro.
¿Y qué va a pasar con las farmacias?
Consultamos a gente del Partido Republicano y de la UDI -entre ellos Ruth Hurtado y Javier Macaya- en caso de ganar la elección, qué planes tienen para las Farmacias Populares, la Universidad Abierta de Recoleta (UAR) y la librería popular de Recoleta (RECOLETRAS). ¿Piensan mantener o cerrar esas instituciones? No obtuvimos respuestas.
Para muchos vecinos urge saber el futuro de las farmacias, hoy en el ojo de la Fiscalía. Es el caso de María Hormazábal, de 63 años. Se declara reacia a la política, aunque se inclina por el «partido verde… el del dinero», dice en tono de broma, para referirse a su precaria situación económica. “Las cosas están difíciles”, agrega. María acude mensualmente a la farmacia popular Ricardo Silva Soto, ubicada en Avenida Recoleta. Queda a pocos metros de su casa, pero a ella le parecen kilómetros. Tiene una hernia tan grande en la zona abdominal que resalta sobre su ropa. En el Hospital San José le aseguraron que el riesgo de morir es alto, pero no tiene los 20 millones de pesos que cuesta la cirugía. El paracetamol la calma.
Farmacia popular “Ricardo Silva Soto”.
Desde la inauguración en el año 2015, acude cada mes a la farmacia para buscar las tres cajas de paracetamol de 1G que necesita para calmar el dolor. En otra farmacia, le sale 5.000 pesos cada una, en la popular, 6.000 las tres. A su nuera le compra mensualmente Gabapentina ($1.142) y Escitalopram ($947) para la depresión, en farmacias no populares el precio de ambas bordea los 10 mil pesos. A su vecino -no inscrito- le compró Latanoprost por 1.000 pesos, que en otros sitios también cuesta cerca de de 10 mil pesos. Considerando solo sus medicamentos, ahorra 9 mil pesos al mes, es decir, 108.000 pesos anuales.
Más allá de los líos judiciales, estos locales han aliviado el bolsillo de María y sus vecinos. Ella misma le dijo a Fares Jadue, una vez que lo encontró visitando una farmacia, que, de salir electo, «las populares deben mantenerse». Aun así, reconoce sin complejos que su candidato no es él, sino el RN, Felipe Cruz.
María aprovecha de conversar con nosotros mientras espera que el vendedor termine de atender a su amiga del alma, Marina Soto. Vienen juntas a comprar sus medicamentos. Como ellas, miles de vecinos siguen la evolución judicial del caso y las «apuestas» de los partidos que buscan ganar la elección. Escuchan de la enorme deuda de Achifarp y comparten un mismo temor: que «las populares» no tengan remedio.
