El grupo de investigadores detectó que el coronavirus puede causar efectos a largo plazo, como la reducción del tamaño hasta un 2%, mayor deterioro cognitivo y alteraciones en las regiones conectadas con la corteza olfativa primaria.
Por Paula Morales Lobos
El Centro Wellcome de Neuroimagen Integrativa (WIN) del Departamento Nuffield, de la Universidad de Oxford, publicó el estudio en la revista Nature. La profesora y autora del estudio, Gwenaëlle Douaud y su equipo de trabajo, accedieron a la base de datos biomédica de Biobank, un recurso de investigación que permite realizar nuevos descubrimientos científicos que mejoran la salud pública del Reino Unido, en la cual investigaron los cambios en los cerebros de 758 participantes. Los pacientes evaluados tenían entre 51 y 81 años, se sometieron a dos escáneres cerebrales, con un promedio de 38 meses de diferencia entre ambos exámenes, y a pruebas cognitivas.
Un total de 401 participantes dieron positivo por infección SARS-CoV-2 entre los dos escaneos, de los cuales solo 15 fueron hospitalizados. Las secuelas descubiertas, se produjeron en promedio 4,5 meses después de la infección.
Según el análisis, en el 96% de los pacientes se detectó una serie de efectos neurológicos, como una mayor reducción de la materia gris en la corteza olfativa primaria, una región cerebral relacionada con el olfato. También mostraron evidencia de una reducción en el tamaño del cerebro completo, efecto que osciló entre un 0,2 y un 2% de cambio adicional en comparación con los pacientes que no contrajeron el virus.
En promedio, los participantes afectados Covid-19 mostraron un mayor deterioro cognitivo, asociado con la atrofia de una parte específica del cerebelo, una estructura cerebral que está relacionada con la cognición. Todos los efectos negativos descubiertos fueron más marcados a edades avanzadas.
El hallazgo permitirá comprender las características de la propagación degenerativa del SARS-CoV-2, pero según el equipo de neurólogos, la vulnerabilidad de las regiones cerebrales requiere mayor investigación, para ver si es posible que con el tiempo se revierta el daño.
Además, está por verse cuál fue el mecanismo que generó la pérdida neuronal que mostró el estudio.
Pablo Salinas, jefe de servicio de neurología y neurocirugía del Hospital San Borja y profesor asistente de la Universidad de Chile, aseguró que probablemente el mecanismo de inflamación que produce el virus, gatilla el proceso de muerte neuronal.
En Chile, el Departamento de Neurología de la Escuela de Medicina de la Universidad Católica, realizó un estudio a pacientes que ingresaron a la Red de Salud UC CHRISTUS. En total 120 de los 1.064 confirmados con Covid, requirieron una evaluación por el equipo de Neurología. De ellos, 24 fueron excluidos del análisis por presentar diagnósticos neurológicos conocidos, pero los 96 restantes fueron sometidos a evaluaciones por diversos síntomas.
El estudio arrojó que las secuelas neurológicas en pacientes que contrajeron la infección serían secundarios en comparación con el sistema respiratorio. Además, en Chile aún faltan datos para relacionar los efectos del Covid-19 con el sistema nervioso, panorama que podría cambiar con el nuevo hallazgo realizado por la Universidad de Oxford.