Por Sebastián San Martin
El sábado 26 y domingo 27 de octubre de 2024, Chile vivirá una jornada electoral histórica en la que sobre 15 millones de ciudadanos (15.450.000, exactamente) deberán participar de manera obligatoria para elegir a sus autoridades locales y regionales.
Los comicios, que abarcarán cuatro elecciones simultáneas, de gobernadores, alcaldes, concejales y consejeros regionales (CORE), ocurrirán mientras la agenda política del último mes ha estado copada por el Caso Audios, que impactó de lleno en la derecha, y el Caso Monsalve, que lo hizo en el oficialismo, y cuyos efectos electorales se conocerán con los resultados de la noche del domingo.
Entre los analistas electorales las opiniones están divididas. Algunos consideran que los casos Audios y Monsalve impactarán poco en estas elecciones de autoridades locales, a las que se evalúa por su gestión, mientras que otros opinan que el impacto mayor será en un aumento de los votos blancos y nulos, como castigo a la llamada «clase política».
El proceso electoral, que se realizará en dos días, ha sido diseñado para facilitar la participación ciudadana, permitiendo que los votantes elijan si acudir el sábado o el domingo. Esta medida, que se implementa por segunda vez en la historia de Chile, busca reducir aglomeraciones y dar mayor flexibilidad al electorado, tal como sucedió en las elecciones de mayo de 2021 durante la pandemia de la COVID-19.
Multas por no ir a las urnas
Además de ser obligatorio, el proceso conlleva sanciones para quienes no acudan a votar. Quienes no cumplan con su deber cívico serán sancionados con una multa de 0,5 Unidades Tributarias Mensuales (UTM), lo que equivale a $33.280, según la normativa vigente.
Para las 200 mil personas que fueron designados vocales de mesa, la multa por no cumplir este deber cívico será superior, de 2 a 8 UTM, esto es, de entre $133.122 y $532.488, y será resuelta por un juez de policía local. El monto que paguen los infractores quedará en los fondos municipales.
Solo habrá tres causales válidas para excusarse de no ir a votar: estar enfermo; estar fuera del país en esos días, o más de 200 kilómetros de distancia de su local de votación. En el caso de estar a más de 200 km. del lugar de votación, se debe dejar constancia en una comisaría en los días de la elección. En las otras causales, el votante tendrá que esperar a ser citado por el juez de policía local y mostrarle los documentos (por ejemplo, certificado médico o el pasaporte) que acreditan la justificación. El juez resolverá según su criterio.
Los independientes
Un dato destacado de estas elecciones es la alta participación de candidatos independientes. Según cifras oficiales del Servicio Electoral (Servel), 3.389 personas solicitaron patrocinios para postular sin el respaldo de partidos políticos, el número más alto registrado en décadas. De estos, 441 buscan competir por uno de los 16 puestos de gobernador regional, mientras que 133 aspiran a ser consejeros regionales.
En cuanto a las elecciones municipales, 1.831 personas se han presentado como candidatos independientes para alcalde, y otros 1.014 ciudadanos recogieron firmas para postularse como concejales. Esto representa una señal del creciente interés de la ciudadanía por participar en los asuntos locales, pero por fuera del tradicional sistema de partidos, en un escenario de debilidad y baja credibilidad de estas instituciones.
El número total de candidatos para estas elecciones supera los 18 mil (18.036, exactamente), lo que convierte este proceso en uno de los más complejos de los últimos años. La diversidad de opciones y el elevado número de postulantes auguran una contienda electoral altamente competitiva en todo el país.
La obligatoriedad de este proceso también se extiende a los vocales de mesa, quienes desempeñarán un papel crucial en asegurar el desarrollo adecuado de la votación. Las autoridades del Servel ya han anunciado un amplio despliegue logístico para garantizar que todo el proceso se realice de forma eficiente.